" Al fin y al cabo, somos lo que hacemos para cambiar lo que somos"

domingo, marzo 30, 2008

Fa cent anys...

Avui, llegint el diari, com quasi cada dia faig, he trobat una notícia. Una notícia que me sonava. La reconeixia. M'era "familiar".
Es tracta d'un conjunt de paraules que juntes recorden un home. Un pare. Un marit, Un padrí. Un amic. Un mestre. Algú amb idees fixes. Independent. Deyà.
Ens resumeixen avui amb set paràgrafs la llarga vida de Miquel Deyà Palerm. Això ha implicat molta dedicació. Moltes hores. Investigació. Descobriments i sorpreses. Miquel Jaume s'encarrega de recopilar tot el que troba. Sobre escoles. Freinet. Ell.
Dia 27 de març d'aquest any hem celebrat el centenari del naixement d'aquell nin, com diu l'article. I jo agreeixo que existeixi aquest article en memòria del meu avi. Agreeixo la feina que hi ha darrera. Agreeixo, poc a poc, anar coneguent i reconeguent el meu avi. Descobrir qui fou i entendre, perque no, la meva part Deyà. Identificar-me i sentir-me orgullosa.
L'article recorda l'estat actual de l'escola de Son Espanyolet. És lamentable. I jo aprofito per recordar que val la pena conservar aquest barri que d'alguna manera té identitat. És especial. És com un petit poble. Tranquil. Ple de plantes baixes. Zona privilegiada per la bona situació i proximitat al centre. Está dins Palma però quan hi ets sents que estàs fora. Per això és interessant la idea de no destruir l'ecant del barri. No soc la primera en dir-ho. I espero no ser la darrera.
Vos convid a llegir l'article. A tots. Amics. Família. Alumnes. Mestres. Tots.

jueves, marzo 20, 2008

Te declaro: culpable!

Culpable! Y toque seco sobre la mesa. Me siento culpable del 37% de las cosas que hago. Es grave, lo sé. Estamos en reformas para mejorar eso. No sirve de nada la libertad si no la usas "libremente", sin remordimientos. Sin culpas. No sé si siempre fue así, pero la sociedad juega con eso. Te hace sentir culpable para conseguir según que cosas. Me parece lamentable. Y lo hacemos casi todos ya sin darnos cuenta. También se usa el chantaje emocional. Eso es cruel. Se trata de mantenerte intranquila todo el tiempo. Acabas dudando de todo y con pánico a defraudar. ¿Defraudar a quién? Si me salen mal las cosas la única defraudada seré yo. No tú. Ni tú. Solo yo. Ya soy responsable de lo que hago. No necesito que nadie me haga chantaje de ningún tipo. Hablo de la sociedad. De los políticos. De la iglesia. De la familia. La gente no debería funcionar así. Pues te pasas la vida reprimida. Esperando no decepcionar a los demás. Y olvidándote de lo qué quieres hacer tú. Terminas haciendo lo que los demás quieren que hagas. Y espero negarme a eso. Y si me equivoco, pagar las consecuencias. Pero ya viene siendo hora de quitarme culpas y vivir tranquila. Disfrutar cada minuto intensamente sin sentirme mal por ello. Estoy harta de dejar perder mis ilusiones. Siempre consiento que alguien me arrebate la ilusión. Eso agota. Y agotada me siento. De castigarme y perderme el respeto. Y con eso permitir que me lo falten a mi. Peco de inocente. Y disfrazo mi inseguridad de valentía. Quiero olvidarme y volverme a recordar. No quiero más pena. Ni más rabia. Ni más nada. Fuera los fantasmas. Aquí solo cabe lo real. Despido al escepticismo que me cubre. Tengo derecho a ser feliz sin que nadie se disguste por ello. Y así será.

miércoles, marzo 19, 2008

¿Hoy de qué es el día?

El día del padre. Otro día sospechoso. Está en medio del cristianismo y el corte ingles. A ver si se han puesto de acuerdo para conservarlo. No pretendo parecer mala hija. Pero a éste paso, podríamos poner un día del hijo, un día de la tía, un día de la prima, un día de la abuela y un largo etcétera. Siempre puedes agradecer a tus padres que te hayan traido al mundo. No necesitamos un día para hacerlo. Y menos cuando se trata de un negocio. La publicidad se enfoca a adolescentes. El corte inglés te hace sentir culpable si no regalas algo a tu papá. Igual con el día de la madre. Si almenos la celebración consistiera en algo más profundo y menos comercial, podría entenderlo. Y sí, ya sé que hay otras celebraciones en las que también te incitan a comprar. Pero algunas son más didácticas que otras. Pensaba en el Sant Jordi, por ejemplo. O en los mismos santos, que también son religiosos pero les veo más sentido. Supongo que es porque donde vivo hay bastante tradición por los santos, auque en otros lugares no los tengan en cuenta.
Igual mando un saludo a mi padre no porque hoy sea el "día del padre", sinó porque es mi padre. Y saludo también a mi amiga Sandra, que mañana es su santo.
¿Por qué lo justifico todo? ¿Os fijáis? Mi próximo post sobre la culpabilidad...

lunes, marzo 17, 2008

Del tiempo y la lejanía

Hoy ví una peli. The lake house. Habla de un amor a distancia. Éso me cae cerca. Pero la distancia era de tiempo. No de lugar. Uno vivía 2 años por delante del otro. Es decir, ella estaba en el 2006. Él en el 2004. Los protagonistas mantienen una relación basada en la correspondencia. Descubren un buzón a través del cual pueden comunicarse. Juegan con el tiempo y consiguen manipular su destino. Quizás pierde la lógica por el camino. Me recordó a escenas de Frequency, una de mis pelis favoritas. Sería divertido e interesante poder jugar con el tiempo. A veces maquiavélico. Observé que a la pareja se le presentaban algunas dudas, malentendidos y problemas que alguna vez me han ocurrido a mi. Solo que yo no debo esperar dos años para solucionarlo. Por ahora. Coincido con la peli en que hasta que no te ves segura de embarcarte en la aventura, no te lanzas y no funciona. Hasta que no asumes el riesgo, no ganas nada. Y cuesta asumir riesgos sin apoyo. Hay que aprender a confiar en uno mismo. Y luchar por lo que uno quiere. A veces, solo a veces, los sueños se hacen realidad. Y otras veces la realidad se hace sueño. Otras pocas veces, pesadilla. Tú decides cómo quieres tu realidad. Tú eres tu destino. Solo tú. Solo.

Un día más o un día menos

Hablo de esos días tapados. Cuando asomo tímidamente mi cabeza por la ventana. Observo la vida de la calle. Gente va y viene. Pilla el coche. Lo aparca. Y yo quieta. Mirando. Viendo salir el sol. Y viendo al rato como se esconde. Se trata de un día tan tranquilo que casi podría decir que lo cedo al mundo. Escucho lo que me dicen. Espío a mi alrededor. Pero no aporto nada. Vivo la vida de los demás. Sin darme yo cuenta. Sin darse cuenta ellos. Y me pregunto ahora dónde empieza mi vida y dónde termina la de los demás. Mis decisiones son mías. Y mi vida tambien. No logro separar a los demás. Y quizás no se trata de eso. Pero a veces pienso que no seré feliz hasta lograrlo. Hasta que no se respete mi vida y todo lo que ella tiene, no estaré en paz con el mundo que me rodea. Hay que decidir. Comunicar. Asumir. Y, finalmente, aceptar. Se aproximan cambios. Aceptémoslo.

domingo, marzo 09, 2008

Una española en Talca

Puedo escribir tres meses sobre Talca, el tiempo exacto que viví ahí. Ni más ni menos. Si voy a hablar de Talca tendré que organizarme un poco. Dividiré el tetxo en 4 partes: la ciudad, la noche talquina, la jerga chilena y la gastronomía.

Talca, la ciudad.
Yo, una chica medio española de la Europa ocidental, lo primero que busco en una ciudad es la plaza principal. En España acostumbra a ser siempre "Plaza España". En Chile por lo que vi podría traducirse por la "Plaza de armas". Casi todas las ciudades chilenas lucen una Plaza de armas y coincide en ser la plaza más céntrica. No en todas las ciudades chilenas, pero sí en Talca, las calles reciben el nombre de números. Por ejemplo, recuerdo que el Balmaceda estaba en la 2 Oriente. Me pareció curioso. Aprendí que Chile se divide por regiones. Talca está en la VII región, y ésta se llama Maule. En mi estancia coincidí con la Fital que suele celebrarse a finales de marzo. Me llamó la atención el nombre que tienen allá los buses: micros. Y tambiém el sistema de los colectivos. Los colectivos son como taxis pero más baratos y siempre hacen el mismo recorrido. Pude subir al cerro de la vírgen y divisar toda la ciudad desde ahí. Muy bonito. Y al bajar me paré a tomar una cañita a orillas del río claro (que no es tan claro como dice su nombre). Es muy tranquilo y agradable. Me gustaba ir a pasear por la 1Oriente, ir a ver a los artesanos. Conseguí que uno de ellos me vendiera un trocito de piedra cruz. Y también logré hacerme con kultrunes y varias joyas procedentes de los mapuches.

La noche talquina.
Después de algunos días en esta ciudad, empecé a montarme la noche. Entre semana solía ir al Tatoha a tomar una birra. Aunque ahí no tenían las que me gustaban. Creo recordar que solo había dos marcas donde elegir: Brahma y Becker. Según me han dicho ahora ya son tres. Aún así iba porque me gustó el rollo del bar y la música. Me quedé con el detalle de que cada silla tiene un nombre: el mejor, el tonto, el rey, etc... Alguna vez fui al Balmaceda, pero nunca fue mi preferido. Está bien la terraza que hay atrás, que no sé si siempre la abren. Música y birras. Los baños no eran muy higiénicos. Pero tenían Heineken. Cuando quería ir más de tranquis, me iba al Embrujo. Un lugar tranquilo, con música y televisión donde salían videos, rollo MTV. Una vez tomé el típico Pisco-sour. Todas las otras veces me decanté por la Caipirinha que te hacía el barman casi delante de ti. Riquísima. Intentaba ir antes de las 22:00 para pillar el happy hour y así tomarme dos. Te lo traen acompañado de palomitas. Rico rico, como diría Arguiñano. Existe tambien, justo detrás del Embrujo otro local llamado Pura candela. El mismo personal del Embrujo pero al ritmo de salsa. La gente más animada sale a bailar. Sólo estuve en una discoteca. El Loft. Siempre coincidió que las chicas entraban gratis así que nunca pagué para entrar. No estaba mal el sitio pero no me acostumbré nunca al dj. Se dedicaba a interrumpir toda canción que sonara o le daba por cantarla él. Patético para mi gusto. Me gustó ir a tomar cañas a la Leonera. Quizás es mejor ir a media tarde. Se siente bien uno entre plantas y enredaderas. Un toque exótico. Fue la primera vez que prové el ají. Y creo que no hubo más veces. Me arrepentí un poco de habérmelo comido. Picaaa! En realidad no fue la única vez que tomé. Se me ocurrió en Castro confundir el ketchup con el ají... No coments! Una noche fui a un local llamado Cuete rojo. Tomé una piscola y recuerdo que había música en vivo. Versiones de Sabina, Maná y Calamaro. Entretenido.

La jerga chilena.
Es lógico pensar que me sorprendió el cambio de acento. Rápidamente distinguí un chileno de un argentino. Creanme que no es tan común saber éso como se pueden pensar. Pero yo pronto lo aprendí. Y según mis amigos, al volver a casa, hablaba catalán con acento chileno. Terminaba mis frases con "po". Ya no me atrevía a "coger" los buses. Dejé de comer aguacates y empecé a comer paltas. Me olvidé de los melocotones y los llamé duraznos. Hay muchísimas palabras nuevas que aprendí esos meses. Guata (barriga). Panqueque (crépe). Closet (armario). Bacán ( guay). Mina (chica). Tía (vieja). Papas ( patatas). Manjar (dulce de leche). Piola (guay). Pasto (césped). Huaso (de pueblo). Fome (aburrido). Aros (pendientes). Sin olvidarme del término "hueón" y todos sus derivados. No conozco chileno menor de 30 años que no úse esa palabra en una de cada dos frases. Tampoco conozco tanto chileno como para generalizar... Pero me huelo que es bastante común. También aprendí algunos insultos pero mejor no publicarlos. Me fijé en la terminación del verbo en la segunda persona del singular. Tiende a termninar en -ai, -ei. Por ejemplo, comei, hablai, tocai, etc... Me entretiene escuchar a un chileno hablar. Alguna vez me enamoró y todo.

Gastronomía.
Fue evidente que no me privé de nada. Pues en tres meses gané 5 kilos. Entre empanadas y cuchuflís. Conocí los famosos completos, aunque no pude comparar mucho. Donde disfruté fue en La fuente germana. Me comí el sanwich más grande y rico de mi vida. Debo reconocer que los restaurantes chinos de Talca son mucho mejores que los de mi ciudad. En Talca si pides un plato de pollo con almendras sientes el sabor a pollo. Genial! Me aficioné al Chancho en piedra y al poche de frutillas de las Viejas cochinas. Bueno, bonito y barato. Descubrí los crépes (panqueques) del Cafe al grano. No desperdicié ni una oportunidad de tomar jugo de frutas, ya que estaban riquísimos. La única pizza que comí fue la del Pirandelo y no me desagradó nada. Una vez fui a comprar pan en un lugar escondido al lado del rio. Excelente pan. Alguna vez salí a pasear por el centro. Se me ocurrió desayunar en un lugar llamado La Papa. Nunca más comería algo ahí. El servicio fue pésimo y la comida también. Lo único que valió la pena fueron los baños: muchos espejos y limpios. Pude en una ocasión catar un Carmenere. Ya que estaba en una región conocida también por su buen vino. Descubrí la cerveza Kunstmann, nunca dejé de tomarla. Igual tomé más de una piscola también. Cada cosa en el escenario que merecía. Comer y beber, esos meses, fue un placer.

miércoles, marzo 05, 2008

Mi vida en canción

A cinco días de cumplir un cuarto de siglo en este mundo me doy cuenta de que cada día es como un videoclip. En realidad toda la vida lo parece. Pues hay tantas canciones como situaciones en la vida. Casi siempre encuentro en la música un motivo para identificarme. Me pregunto, a veces, si me monto situaciones según la canción que escucho o más bien encuentro la canción adecuada para cada momento. En fin, ¿Qué va antes el huevo o la gallina?
A veces voy conduciendo, con música siempre, y me siento una chica de videoclip casero. De esos videoclips donde salen las cosas cotidianas. Lo de cada día. Pues hoy pensaba qué canciones eligiría para cada sensación, momento, experiencia que voy viviendo. Os prometo que mi vida no quedaría sosa. También hay el problema de que, a menudo, escuchas una canción con alguien y no puedes evitar despegarla de esa persona. O si alguien te recomienda una canción, tus orejas ya van predispuestas a escuchar con atención y desde el punto de vista de quien recomienda. Tratas de relacionar la canción con la persona. O sea que la música no es objetiva. O mejor, nosotros no somos objetivos al percibirla.
Mis momentos:
Para las mañanas que no madrugo, eso suele significar que no trabajo, pondría la canción de "Me siento bien" de los Hombres G. O quizás "Bon dia" de Els pets. O tal vez "Just my imagination" de Cranberries.
Para mis pequeños conflictos con mi pareja pondría "Tal para cual" de Luz Casal.
En mis días feministas pondría "Soy mujer" de Chenoa, "The best" de Tina Turner o "I'm just a girl" de No Doubt. Quizás también algo de Edith Piaf.
Si pienso en mi infancia, recordaré Mecano y Sabina que era lo que escuchaba mi madre en el coche. Recordaré, también, los Beatles y The king of rock que era lo que escuchaba mi padre. Con esa música me crié. Bueno, y algo de música mallorquina medio nacionalista (Biel Majoral).
En mis buenos momentos catalanistas y algo independentistas tiendo a escuchar SAU, Anegats, Sopa de cabra, Pep Sala, etc... De todos, me quedo con Pep Sala.
Para esos momentos, tirada en la cama, cansada y pensativa opto por que la discografía de Bon Jovi vaya sonando.
La música del coche varía mucho. Pero para conducir de camino a las verbenas de verano elijo a Muchachito o Macaco. También para que me acompañen de camino a la playa. Para mi Muchachito significa buen rollo.
En una cena con mi mejor amiga (Sí, soy media cursi. Ya lo dejé claro en mi anterior post, aunque no cumplo todos los requisitos. Alguien me comentó ayer que soy una "mezcla" entre cursi y friki...) sonaría "Libres" de Vega, o "Don't speak" de No Doubt.
Si viajo a Madrid, recorreré las calles pensando en Sabina. En sus rincones madrileños.
Cuando disfruto de mi mayor hobbie, armar joyas y algunas manualidades, me gusta escuchar canciones melódicas que me permitan canturrear sin prestar atención a lo que canto. Ya que cuento con la habilidad de inventarme las letras de ese tipo de canciones. Yo lo llamo personalizar la canción, hacerla más tuya... Por ejemplo, algo de Pereza o La oreja de van gogh.
En momentos débiles me meto energía a través de clásicos como "Still loving you" de Scorpions, "Always" de Bon Jovi, "Zombie" de Cranberries, "Nothing else matters" de Metallica, "November rains" de Guns&Roses, y un largo etc de buenas baladas. Masoquismo humano femenino.
Si me encuentro en alguna calle de Talca con mi niño, sentados tomando algún zumo, caña o café, seguramente estaremos inventando nuevas letras al son de Estopa interrumpidas por carcajadas de la poca vergüenza que nos queda. Con la escusa de novio chileno he podido conocer algo de música chilena como son Los Bunkers, un chiquillo que canta "Te enojai por tó" (cuyo nombre no puedo recordar), Los Jaivas, Lucibel, etc...
Para salir de fiesta me gusta que me sorprendan con alguna melodía de Los piratas, Hombres G, Macaco, Heroes del silencio... Más que nada para romper con la música que suena toda la semana en los 40 o en Europa fm. Es cansina la repeteción.
Si paseo por Buenos Aires quiero escuchar a Calamaro, Soda Stereo o La Renga. Mis primos argentinos influyeron ahí.
Siempre tengo tiempo para escuchar a Aerosmith. Sirve para casi todos los momentos. Lo mismo me pasa con Queen.
En mi adolescencia nadé entre Green Day, Off Spring, REM, y un largo etcétera.
Hay momentos en los que estoy simplemente tranquila. Ahí me gusta escuchar Revólver, M-Clan o algo de Jarabe de Palo.
A veces me siento muy enérgica. En esos momentos me gusta la música a muchos decibelios. Escucho algo como Nickelback, Sentenced, Muse, Placebo o Darkness. Esos serían mis momentos más heavys del día. No voy a más.
Y así podría seguir... Pero ya fue sufuciente por hoy. Ya habrá la oportunidad de encontrar más momentos a los que asignar música. Me alegro de tener la banda sonora de mi vida, aunque suene a título de película...

domingo, marzo 02, 2008

Soy un poco cursi, y qué?

Hola,
Soy un Tag de éste blog. Me llamo "Soy un poco cursi, y qué?". Algunos me llaman Betty. Y acabo de salir de mis casillas. Aproveché ésta noche para salir del cajón elistista. En cuanto mi dueña se acostó, entre la confusión y la tristeza, salí del cajón para meterme de pleno en la pantalla. Parece que lo logré. Todo éste esfuerzo no fue porque si. Me estoy revelando. Pues ya necesito dejar clara mi dirección. Como mi nombre bien indica soy cursi por esencia. No puedo evitarlo. Y mi dueña se empeña en parecer fuerte y orgullosa, cosa muy común entre los humanos. Quiero recordar que no hay nada de malo en ser como yo. Se puede llorar libremente. No te mueres si lloras. Sobrevives al llanto. Está demostrado. Y además dicen que es sano. A mi me asocian siempre a las chicas. A las niñas. y estoy orgullosa de estar dentro de ellas. Me encanta que cuando piensan en mi se dibuje en su mente la imagen de Hello Kitty. Me caracterizo por tener un vocabulario alto en colesterol. Super sweet. Vivo en una nube de azúcar. Mi techo es el arcoiris. Y me alimento de golosinas. Soy de color rosa, tambien por esencia. Aunque mi color preferido es el celeste.
La cuestión es que hoy estoy revolucionada. Es como si acabara de salir del armario. Me revelo. Porque estoy harta de que me usen como insulto. No soy un insulto. Soy un Tag digno. Soy legal. Y no quiero que los chicos me teman ni me insulten. Pues estoy al lado de muchos que a menudo me esconden, porque no me consideran varonil. Soy como la palabra gay. No temáis. Sacad los sentimientos a la luz.
Hay unos cuantos puntos que quisiera resaltar y explicar:
1. Acompaño a las niñas en su infancia. A veces les impido hacerse mujeres. Soy un poco el Peter Pan de las niñas. Pero considero que una mujer con rasgos infantiles puede ser más graciosa e imaginativa que una mujer totalmente cuerda, seria y madura.
2. Quizás no me insertaron el chip de la madurez cuando me programaron. Pero eso no me impide ser feliz.
3. Me gusta ver como mis niñas son sorprendidas con un ramo de flores, con una visita sorpresa, con una poesía casera. Les hago buscar el principe azul. Ése que no existe. Éso reconozco que es mi pequeña diversión, algo perversa porque les pinto un mundo utópico rosa, como el mío. Irreal.
4. Les enseño a escribir cartas de amor en hojas perfumadas. Y me preocupo de que éstas sean enviadas. Hago llegar a sus manos pegatinas de corazones y conejitos para que las peguen en dichas cartas. Monísimo!
5. Yo fui la que inventó el concepto de "mejores amigas". Úno niñas para que no estén solas y les hago creer que nunca se fallaran la una a la otra. Todo empieza con el conocido ritual "Fiesta de pijamas", un poco norteamericano el ritual.
6. También les armo una coleccion de discos poperos para que usen esas frases que tanto me molan. También para que sean cultas (poperamente hablando). Si cuela les hago ver algunas series como: Los osos amorosos, Ana de las tejas verdes, Valentina, Julia, etc... Y las animo a ir a Gran Hermano.
7. Declaro, a las niñas, fans de los peluches. Sobretodo de los conejitos y ositos.
8. Intento influir en ellas junto con mis amigas que son la superficialidad (súper guapa), la ratita presumida (super coqueta), los lápices de colores... Les doy un nivel que también puede considerarse friki. Una friqueza cursi. las niñas a veces sufren confusión entre la cursilería y la pijería. Mezclan conceptos ya que yo no logro separarlas.
9. Siempre huelo bien, a fresa o a vainilla. Soy adicta a los perfumes de frutas.
10. Odio la mala letra. Obligo a pasar los apuntes de clase a limpio. Con el título de color diferente al resto del texto. Los textos terminan siempre con mi firma, un corazón rojo que deja constancia de que yo estuve ahí.
Bueno, ya debo irme a mi cajón que se hace de día y mi dueña va a despertar. Algún día volveré a recordaros que existo! Sed happy happy. Hasta pronto,
Betty